Sergei Rachmaninov
PIANO CONCERTO Nr. 3 , Op. 30
Vladimir Horowitz, Piano
New York Philharmonic
Dir: Eugene Ormandy
(Carnegie Hall, 8 de enero de 1978)
(RCA)
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Estreno, Carnegie Hall, 28 de Noviembre de 1909.
Sergei Rachmaninov, Piano
New York Philharmonic
Dir: Walter Damrosch.
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Rachmaninov comenzó a componer su Tercer Concierto en su finca de verano en Ivanovka a principios de 1909. Iba a ser un concierto especialmente destinado al público de los Estados Unidos, y aunque no le gustaba el modo de vida americano ni su público, la oportunidad económica era prometedora. Las circunstancias de la composición y estreno del mismo concierto son dignas de una película, desde el compositor ensayando el concierto en teclado mudo a bordo del barco rumbo a New York, hasta el episodio del posestreno secundado por Gustav Mahler. Y a pesar de la recepción favorable del concierto, el público seguía prefiriendo que el compositor tocara en sus giras el concierto Nr. 2, cosa que no dejó de incomodarlo.
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Las enormes complejidades completamente inéditas que plantea la obra se manifiestan en el modo en que el mismo compositor aborda su propio concierto. Afortunadamente existe registro grabado del propio Rach al piano, acompañado por Eugene Ormandy y la Orquesta de Filadelfia, donde se aprecia y se entiende la poca predilección del compositor en colocarse él mismo al piano con su Nr. 3. De igual modo y afortunadamente su colega y amigo Vladimir Horowitz adoptó desde bien temprano la obra, superando con creces todos los desafíos técnicos y armónicos de la misma. Existen numerosas grabaciones de Horowitz a través de los años, la más antígua probablemente una de 1929 con la LSO al mando de Albert Coates y siendo la última la realizada en Lincoln Center con el acompañamiento de Zubin Mehta al frente de la Filarmónica de New York.
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En el año 1978 y con motivo de la celebración de los 50 años del debut americano de Vladimir Horowitz, se llevó a cabo una Gala que incluía el Concierto Nr. 3 de Rach. La orquesta fué la Filarmónica de New York y el director invitado el célebre Eugene Ormandy, ya un maestro consumado y titular de la Orquesta de Filadelfia. Por solicitud de Horowitz el concierto se realizó en Carnegie Hall, sede originaria de la orquesta y lugar de estreno del concierto 70 años atrás. El éxito fué completo con una prolongada ovación. El revuelo del concierto fue de tales proporciones que hasta mereció una reseña desde la Casa Blanca, con saludos y felicitaciones personales del Presidente Jimmy Carter al homenajeado.
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El estilo de Horowitz al frente de éste concierto siempre fué el de un técnico consumado, capaz de resolver todos los entramados de la partitura, sin embargo en ésta grabación se nos presenta un Horowitz más poético, reposado, capaz de frasear y paladear cada fragmento, detalle y compás en perfecto ensamblaje con un director y orquesta que se mostraron a la altura del momento. El resultado, una de las grabaciones de referencia para ésta obra, con la emoción de la toma de sonido de un concierto en vivo. Y aunque hoy existen solistas incluso más virtuosos y con trazo de diamante que son capaces de extraer aún más de ésta partituta irrepetible, la cátedra sentada por Horowitz se mantendrá siempre como una de las referencias para el Opus 30.
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M-S.
